Estimadas autoridades, Padre Ricardo Cortés: Vicario
de la pastoral diocesana, estimadas mamás, papás, apoderados; profesoras y
profesores, asistentes de la educación, manipuladoras de alimentos, queridos
alumnas y alumnos:
123 años de la Escuela Bernardo O´Higgins en San
Felipe evidencia que ha habido un desafío permanente, no sólo por perdurar en
el tiempo, sino por demostrar que ese tiempo no ha sido vano. En su inicio como escuela elemental en 1890
tuvo por objetivo enseñar a leer, a escribir y a adoptar costumbres; casi 1
siglo después en 1983 se crea la escuela superior de niños que permite instruir
en los saberes acumulados; hoy en el siglo XXI (año 2013) se nos demanda que
seamos creadores de mundos o transformadores culturales y sociales en nuestro país.
Una escuela con ese reto debe ser innovadora, ¿qué quiere decir esto?:
1. 1..
Somos seres individuales. Nuestra percepción del
País no es única. El mundo no es objetivo. Cada ser humano puede reconocer y
construir de manera diferente a este país.
2. 2. Somos diversos. Nuestro País no lo construyen
los gobernantes ni los poderes políticos, lo construye cada uno de ustedes y
por lo tanto tenemos millones de formas de construir nuestro mundo.
3. 3.
Somos transformadores. Se nos ha hecho creer por muchos años que la
educación es una adaptación para vivir en nuestra sociedad; una preparación
para sobrevivir en la dura competencia; esto no es así. Hoy sabemos que educar
es un proceso de convivir con otros y transformar nuestro entorno para un bien
mutuo. Por lo tanto, la educación la debemos enfocar para promover los cambios,
contra el viento y contra corriente, para que surja el respeto en la
convivencia que no genera ni pobreza, ni violencia ni abuso.
4. 4.
Somos legítimos. Actores reales que quieren
gozar igualmente de los bienes y derechos.
Toquinho dice en una de sus hermosas canciones "Piensa que el
futuro es una acuarela y tu vida un lienso que colorear".
La Escuela Bernardo O´Higgins enfrenta hoy un nuevo
desafío, abandonar definitivamente la
competencia insensata, que genera pobreza y resentimiento y la conquista
destructora de nuestro planeta y
abocarse más a que cada niña y niño participe activamente con sus
emociones, afectos, inteligencias, y actitudes, a la colaboración y al
entendimiento de nuestro entorno.
Estimados todos, es imperativo que lo que haya que mejorar,
se mejore y lo que haya que cambiar, se cambie.
Muchas
gracias y bienvenidos a todos a participar y compartir esta noble tarea de
educar.
